Jonás Álvarez: “No se puede cortar el ocio a las cinco por el horario del ferry”
Pejeverde
Las limitaciones en la oferta de ocio juvenil en La Graciosa tienen nombre, apellidos y horario: el del último ferry de vuelta a Lanzarote. Talleres, actividades educativas, jornadas culturales... todo termina antes del atardecer porque el personal tiene que regresar en barco. Es la realidad que ha expuesto Primero Teguise (PTG) tras sus recientes jornadas celebradas en la Octava isla, los días 21 y 22 de junio.
El presidente del partido, Jonás Álvarez, ha reclamado públicamente la creación de una Casa de la Juventud en La Graciosa. “No es lógico que un taller de danza urbana se corte a las 17:00 porque el monitor tiene que coger el ferry. En verano, con luz hasta las 21:00, el ocio se interrumpe a media tarde”, señaló Álvarez en una asamblea abierta con vecinos.
La propuesta va más allá del ocio: también serviría como punto de encuentro para asociaciones juveniles y deportivas, e incluso podría incluir un pequeño albergue para facilitar la estancia de monitores y docentes. Desde PTG consideran que el centro sociocultural existente no cubre las necesidades actuales. “Está medio vacío, necesita mantenimiento urgente y no tiene ni siquiera un plan para rehabilitar su bar. Pretender que todo pase por ahí es una manera de cortar las alas a los jóvenes”, afirmó el concejal.
Además, el partido advierte que el aislamiento afecta también al refuerzo educativo. Actualmente, muchas familias deben desplazarse incluso hasta Guatiza para encontrar actividades extraescolares o clases de apoyo, ante la falta de alternativas en la isla. “Nuestro municipio se parte en dos, entre Guatiza y La Graciosa, y eso nos deja atrás”, apuntan desde la formación.
Durante la asamblea del sábado 22, PTG también denunció el silencio del Ayuntamiento de Teguise ante la petición vecinal de mantener activo un taller de teatro. Hasta 65 registros de entrada han sido ignorados, a pesar de que esa actividad reunía a casi el 15% de los residentes de la isla.
“Hay un abandono evidente. Nos dicen que están trabajando en ello, pero no hay resultados”, denunció Álvarez. “Teguise está en deuda con La Graciosa, y es hora de tratar a sus vecinos con el respeto y la dignidad que merecen”.