¿21 años de ilusión perdida?
Por Jaime Cortezo.
Hace 21 años decidí invertir en la compra de un suelo.Viajé a Lanzarote, y después de darle una vuelta al Islote del Francés me senté mirando hacia el sur, en uno de esos días bonitos con el mar en calma y el sol brillando en el mar, ¡impresionante!, luego mire a la derecha y vi la ciudad,¡¡ impresionante!!, ¡¡¡otro tipo de impresión!!! Pensé convencido que sería la obra que cualquier ser humano querría hacer para que lo recordara su familia, sus amigos y las generaciones de desconocidos que vengan a este complejo mundo.
Hace 21 años que recibo a cambio de tanta ilusión y de tantas ganas de hacer que las cosas sean mejores, insultos, mentiras y proposiciones inaceptables. Llegué a Arrecife convencido de que sus habitantes tenían razón cuando defendían que su frente litoral era de los mejores de Canarias, no del mundo. Llegué en un momento en el que, por desgracia, la industria de la mar de la que tantas y tantas generaciones habían vivido estaba llegando a su fin. Llegué en un momento en el que esa desindustrialización estaba generando notables problemas, estaba provocando además una enorme incertidumbre a aquellos que no veían una salida a su futuro. Llegué en un momento en el que el capital privado huía como si en lugar de ver como otros veíamos, un lugar único con una marina espectacular y llena de posibilidades, solo vieran la mierda de ciudad que podría contaminar sus aspiraciones de lucro. Tenía de ejemplo Bilbao.
En los primeros viajes te van presentando a mucha gente y quedas con algunos que te anuncian que te pueden echar una mano. Me sorprendieron varias cosas, las dos primeras personas que me pidieron dinero por ayudarme fueron dos periodistas de distintos medios y formato, la cantidad era la misma, grande en aquella época, y ambos presumían que los partidos A y B hacían lo que ellos querían, inolvidable. Hasta entonces los que pedían dinero, eran algunos políticos o algún funcionario, al poco me lo pidieron varios políticos, sorpresa otra vez, uno de ellos pidió 20 más que los periodistas, para redondear supongo, pero la cantidad había que repartirla entre cuatro partidos, nunca me había ocurrido, una especie de Robin Lanzarote, y nunca pregunté si era verdad lo de los otros tres. Jamás me ha pasado en otro lugar que sí que me han pedido dinero, con no darlo está resuelto.
Al final verán que poco ha cambiado Arrecife. Durante mucho tiempo puse empeño, ganas y mucho dinero para demostrar que un empresario de Gran Canaria como yo, podía creer y hacer más por Lanzarote de lo que lo hacían muchos de los que habían nacido allí. Arrecife era tan mejorable que no parecía difícil. Me empeñé en trasladar esa ilusión, en un absurdo intento por hacer ver a todo el mundo lo que yo veía. Y estaba convencido de que lo lograría. 21 años después, con todo lo que ha sucedido, deambulo de nuevo por el sendero de la incredulidad, ese en el que jamás creí caer, ese en el que muchos amigos me advirtieron que terminaría si no era capaz de liquidar los poderes fácticos que dominan un Lanzarote en el que después de la muerte de César Manrique, han desaparecido las ganas de hacer cosas que merezcan la pena. Ahora, en la actualidad, parece que todo se deja caer de nuevo sin pelea aparente en el buche de un falso ecologismo y de una burocratizada y profesionalizada clase política a la que solo le interesa el sueldo, sin olvidar algunos empresarios de Lanzarote que no lo son.
El primer político al que le pedí una entrevista fue a JoséMaría Espino, concejal de urbanismo en ese momento, creo que de alcalde estaba Cándido Armas, no estoy seguro de que le sustituyera María Isabel Déniz, a continuación Manuela Armas con la que fui junto a 50 personas a Miami, haría falta otro artículo para contar las anécdotas, ¡fuerte tropa!, algunos buenos amigos conseguí en ese viaje, luego llegó de nuevo a la alcaldía María Isabel Déniz, Enrique Pérez Parrilla, Cándido Reguera, José Montelongo, de nuevo Montelongo y Eva de Anta. Alguno se me olvidará. Muchas más alcaldías que alcaldes, porque me acuerdo de que en los primeros 14 o 17 años iba por 11 alcaldías. Nunca en mayoría y siempre en pactos complicados. En 21 años siempre le he pedido una entrevista al Alcalde y nunca he sido recibido por menos de cinco personas, cosa que reconozco que me choca.
Es cierto, y si puedo lo contaré en otro artículo que me propongo escribir, que ha habido excepciones. Me he tropezado con políticos como el ya desaparecido alcalde Cándido Reguera y su grupo de gobierno que sí tiraron para adelante con la idea de asumir un proyecto que habría hecho que el Arrecife de 2018 no se pareciera en nada al actual, un Arrecife que habría tirado del carro de un progreso que a su vez habría hecho cambiar la imagen del patito feo de Lanzarote, que ni debe ni merece serlo. Por desgracia, los constantes vaivenes de la política local, el enorme influjo de esos poderes sombríos, han enterrado una y otra vez cualquier esperanza de que se hagan las cosas como se deben hacer. La historia del Islote del Francés es la historia de una tremenda ignominia.
El injusto desarrollo de una mentira que se ha extendido y que difícilmente puede eliminarse ya del pensamiento colectivo de muchos vecinos a los que se ha estado intoxicando de forma fraudulenta. Porque me parece un fraude a día de hoy que diferentes dirigentes del Ayuntamiento de Arrecife hayan estado poniendo a conciencia palos en la rueda del desarrollo de lo que ahí, tarde o temprano, tendrá que pasar, sólo para ganar tiempo y favorecer con ello los intereses de aquellos que parece que controlan sus cuerpos y su gran mentira.
Lo que se ha proyectado siempre para el Islote del Francés es una enorme inversión que vendría a dar un salto de calidad enorme a un municipio donde en los últimos 21 años no se ha hecho nada que sea digno de mención, nada que merezca pasar a la historia ni al recuerdo colectivo de sus habitantes, y con anterioridad poco que conservar. - Cuando yo compre el suelo en 1997, encima del mismo habían construidos algo más de 90.000 metros cuadrados en más de 20.000 metros de suelo, entre otras una fábrica de harina de pescado, la segunda mayor del mundo detrás de Perú, una fábrica de conservas de pescado, que en su momento dio trabajo a 650 familias, una fábrica de hielo, dos naves para almacenar la sal, dos naves que servían para almacenar coches y un taller para su reparación, una nave de oficinas, y una serie de pequeñas construcciones y por supuesto, había un transformador eléctrico, luz, agua corriente, alcantarillado, aljibe, viales y encintado de acera. Todo lo que se pedía y exigía la ley para que el suelo fuera considerado urbano consolidado. Hay un peritaje topográfico y fotográfico que lo certifica. ¡Ah!, y con 19 metros de altura alguna de ella. - Es suelo de propiedad privada. Al menos desde 1864. Marqués de Lanzarote… habiendo inscrito la posesión de ella con el número dos al folio nueve del libro segundo de la jurisdicción de Arrecife de la antigua Contaduría en 1864, y habiendo fallecido el 13 de marzo de 1875. Era hijo de Juan Bautista de Queralt y de Pinós, 8º Conde de Santa Coloma, y de María Luisa de Silva y González de Castejón, 15º Condesa de Cifuentes… Y así llegamos a la venta de 70 enteros, 664 milésimas por ciento del Islote más otra finca más que no es objeto de operación, que realiza Don Alfonso de Queralt Gil Delgado, Conde de Serena a Don Rodolfo Alonso Lamberti, casado con Carmen Prieto Moressi, vecino de Vigo, sujetas a los censos mencionados arriba, se inscribe mediante escritura de fecha 29/1/1941. - Es suelo urbano desde antes de 1991. Por sentencia firme de 19-10-1993,que dice entre otras cosas lo siguiente:…“Mediante sendos escritos fechados a 5 de marzo de 1991, las entidades hoy demandantes formularon recurso de reposición…” Fallamos: 1º Estimar en parte el Recurso contencioso administrativo formulado por Rocar, S.A. contra la orden del consejero de Política Territorial de 18 de Enero de 1991, que se anula en cuanto hace referencia a la calificación de suelo urbanizable asignado a los terrenos que aquella posee en el lugar denominado “El Islote del Francés”, procediendo para los mismos la clasificación de urbanos, con las consecuencias compensatorias que de esta clasificación se deriven”.
En 1968 primer Plan General aprobado de la ciudad lo recoge con la categoría de Reserva Urbana, no rusticó, ni agrícola, con ninguna protección, Reserva Urbana, para el asentamiento de las personas. -Veintisiete años (27) para ser compensado bien mediante dinero o permuta de igual valor son muchos años engañando a los propietarios. No se le puede quitar la propiedad a nadie, en este caso durante una generación, no hay ni un solo argumento decente que lo justifique. - Si me permuta suelo, lo menos que tiene que cumplir es que su valor sea igual al del Islote, y que los usos sobre el mismo puedan ser vendidos con cierta facilidad en el mercado. ¿Qué se puede hacer con el Islote del Francés?, desde luego no la serie de mentiras que se han publicado durante tanto tiempo: 1.- Que lo expropien, ya que si discrepamos en el precio la comisión de valoración y un juez lo fijan. 2.- Permuta por suelo urbanizado con una edificabilidad que tenga el mismo valor que la edificabilidad legal que tiene el Islote del Francés, 60.700 metros por 2,5 metro cuadrado por metro cuadrado, se valora, y se permuta por un suelo urbanizado con una edificabilidad que tenga el mismo valor. Fíjense que ni siquiera les sitúo el suelo, mismo valor traducido a metros cuadrados edificables con un uso fácil de vender. 3.- Una cesta de dinero y permuta. 4.- Si no tiene dinero, si no tiene suelo, si no puede hacer un pago aceptable con dinero y suelo edificable, me deja edificar lo que permite la Ley, 151.750 metros cuadrados edificables. Las reglas están escritas hace mucho tiempo, cambiarlas en medio del juego es trampa. No se puede robar a la gente mediante subterfugios legales,porque al final acaban pagando los de la siguiente generación.
El Islote del Francés está condicionado por GINORY, el solar que da al charco y que tiene sentencia firme, estando en ejecución de sentencia por el juzgado en TREINTA MILLONES DE EUROS (30.000.000 €), 22,5 de principal más 8 de intereses, el Plan General de Ordenación Supletorio le da una edificabilidad de más de 17.000 metros cuadrados teniendo una superficie de algo más de 11.000 metros, EL ISLOTE DEL FRANCÉS, por superficie y por su mejor situación es SEIS VECES MÁS GRANDE, y el Ayuntamiento está preso de ambos y de todas las burradas que se han hecho con anterioridad, entre TRES Y CINCO suelos de los Herederos del Cabo Pedro, DOS suelos que ya está pagando, etc. No me extrañaría nada, que en los próximos cuatro o seis años si no se resuelve el Plan General Supletorio, no se resuelven los contenciosos provocados y los que se puedan provocar, el ayuntamiento estará pagando más de DOSCIENTOS CINCUENTA MILLONES DE EUROS (250.000.000 €), y consecuentemente QUEBRADO E INTERVENIDO. A día de hoy y sorprendentemente, el Gobierno en vez de aprobar inicialmente el Plan Supletorio ya consensuado con el Ayuntamiento, le ha facilitado el documento al Ayuntamiento y los grupos políticos, alguien lo ha facilitado a solo dos medios de comunicación, generando una situación de información privilegiada que ha llevado a que de nuevo se pida dinero…El Gato Pardo. Gobierno y Ayuntamiento deben aprobar cuanto antes inicialmente el Plan General de Ordenación Supletorio de Arrecife, y poner a disposición de todos el documento, solo así volveremos a la normalidad, quien tenga algo que proponer sabe que la vía es por alegaciones durante los 45 días de exposición pública, si no le gusta la contestación y se aprueba algo con lo que esté en desacuerdo tiene a los tribunales. Esas son las reglas y no otras. Asisto atónito de nuevo (a mi edad y viendo lo que he visto ya debería estar curado de espanto) a la reapertura del mismo debate que se ha venido organizando por parte de los poderes fácticos que quieren que Arrecife no se transforme.
De forma insólita, los mismos vuelven a poner en marcha la táctica de siempre, y probablemente les saldrá bien una vez más. Arrecife está llena de colaboradores necesarios. Comienzan con su carrusel de desinformaciones, con la difusión de un falso mensaje ecologista, con el desprestigio de los promotores del proyecto, y luego trituran cualquier posibilidad real de que los dirigentes políticos de la capital de Lanzarote, pongan en marcha algo que no sólo no les iba a costar dinero a sus vecinos, sino que supondría un formidable punto de partida para un futuro mucho mejor para todos ellos. Un drama realista con tintes de farsa tragicomedia. Algunos amigos, algunos familiares, no entienden como he sido capaz en todo este tiempo de no tirar la toalla, de mandarlo todo al carajo. La respuesta es sencilla: El día que me senté en el Islote del Francés y vi la ciudad de Arrecife, la bella y la bestia. Quiero ser consciente de que he hecho todo lo que he podido para lograrlo, que no me he rendido y que finalmente el tiempo demostró que había posibilidades de conseguir un Arrecife mejor. Lo cobraremos algún día y lamentablemente lo pagará el ciudadano de Arrecife