“Europa tiene que espabilar”: la advertencia de José Valle desde Berlín
Foto. Elpejeverde.com. ITB Berlín.
S. Calleja
En plena feria ITB de Berlín, uno de los encuentros turísticos más relevantes a nivel mundial, Lanzarote no quiso perder la oportunidad de reforzar lazos con uno de sus mercados estratégicos: el alemán. José Valle, presidente de la Cámara de Comercio de Lanzarote y La Graciosa, valoraba in situ la presencia insular en la capital alemana, destacando la importancia de “estar aquí con los alemanes, a pesar de lo que se barrunta en cuanto a la geopolítica”.
En un contexto de incertidumbre internacional y con Alemania enfrentándose a un año electoral que podría marcar un giro político significativo, Valle subrayó la necesidad de seguir apostando por el mercado alemán. “Es importantísimo que le vaya bien a los alemanes porque sus vacaciones las pasan en Canarias y en Lanzarote”, apuntó, consciente del impacto directo que la estabilidad económica y social del país germano tiene sobre el destino lanzaroteño.
Aunque el turismo británico sigue siendo el motor principal del sector turístico insular, José Valle recordó la importancia de diversificar los mercados emisores y fortalecer la oferta complementaria. “Estamos intentando diversificar el turismo”, explicó, destacando el trabajo conjunto que realiza la Sociedad de Promoción y la Cámara para enriquecer la experiencia turística. “Lo que tenemos que buscar es más que un único destino, es dar esos todos argumentos para que cada vez ese turismo que busca la experiencia, que no solamente quiere sol y playa, consume Lanzarote en el buen sentido”.
Gastronomía, cultura y actividades diferenciadas son las claves para posicionar a Lanzarote como un destino líder no solo en cantidad de turistas, sino también en gasto por visitante, uno de los retos actuales del sector.
Respecto al incierto clima político mundial y su posible repercusión en el turismo, Valle no esquivó el tema. “Estamos en un momento donde también el show político a nivel mundial está insistiendo”, dijo, refiriéndose a la vuelta al poder de líderes como Donald Trump. Sin embargo, lanzó un mensaje de tranquilidad: “Estoy convencido de que las aguas se calmarán”.
Y aprovechó para lanzar una advertencia al viejo continente: “Europa tiene que espabilar porque lo que no podemos es quedarnos como el gran legislador del mundo cuando la productividad cada vez la tenemos peor”. En su opinión, es prioritario que el continente apueste decididamente por la innovación y la industria para no perder su peso global frente a otras potencias.
Así, entre debates geopolíticos, estrategias turísticas y una firme defensa del potencial de Lanzarote, la ITB de Berlín sirvió como escaparate para recordar que el turismo es mucho más que cifras: es también diplomacia, previsión y adaptación constante a los retos globales.