Lanzarote apuesta por el equilibrio: ayudas a la vivienda y control de alquileres turístico
PJ
En una medida destinada a aliviar la presión habitacional que aqueja a Lanzarote y La Graciosa, el Cabildo de Lanzarote, liderado por el presidente Oswaldo Betancort, ha anunciado una línea de subvenciones de 2,2 millones de euros para los demandantes de vivienda, con especial atención a los jóvenes. Este apoyo económico surge en respuesta a la creciente dificultad para acceder a una vivienda digna en la isla, donde los precios de alquiler se han disparado, alcanzando en promedio los 1.000 euros mensuales.
Durante el pleno extraordinario sobre el Estado de la Isla, Betancort señaló que la medida busca mitigar la crisis habitacional y combatir los efectos de lo que calificó como una "nefasta política de vivienda" por parte del Gobierno central, que, en su opinión, ha dejado desprotegidos a los propietarios y alentado la ocupación ilegal. El presidente del Cabildo resaltó la importancia de estas ayudas como parte de un paquete integral de acciones dirigido a frenar el déficit habitacional en la isla.
Betancort detalló el compromiso de su administración con la vivienda asequible, mencionando el convenio con el Instituto Canario de la Vivienda para habilitar suelo en municipios clave, como Arrecife y Yaiza, para nuevas construcciones de alquiler razonable. Asimismo, indicó que el Cabildo destinará este año 11 millones de euros a la compra de terrenos en distintos municipios, sumado a una inversión de 9 millones para la adquisición de 42 viviendas en construcción en Uga, destinadas al alquiler social.
La problemática de la vivienda en Lanzarote también se ha visto acentuada por el auge de las viviendas vacacionales, cuyo crecimiento ha sobrepasado la capacidad turística establecida en varios municipios, como Haría, Tías y San Bartolomé, que han excedido con creces sus límites de plazas asignadas. Betancort advirtió que esta tendencia ha afectado la disponibilidad de viviendas a precios accesibles para los residentes locales, un fenómeno que el nuevo anteproyecto de Ley de Ordenación Sostenible del Uso Turístico de Viviendas, impulsado por el Gobierno de Canarias, busca regular.
Con este paquete de ayudas y regulación, el Cabildo apuesta por equilibrar el acceso a la vivienda, frenando la especulación y al mismo tiempo permitiendo a los lanzaroteños obtener ingresos de manera regulada, sin comprometer la disponibilidad de viviendas asequibles en la isla.