domingo, 08 septiembre 2024

Humor y política: Ginés González y la absurda idea de un pacto PSOE-Vox

S.Calleja

La política española lleva años contaminada por prácticas deshonestas y traiciones disfrazadas de responsabilidad. El caso de Ginés González, exmiembro de Vox y actual concejal de Policía Local en Teguise, es un claro ejemplo del trasfuguismo más descarado. González, quien ahora alega diferencias ideológicas con su antiguo partido, se une a la lista de políticos que utilizan las artimañas clásicas para justificar su deslealtad y perpetuarse en el poder.

 

Ginés González afirma que las declaraciones de Santiago Abascal sobre la inmigración en España fueron la gota que colmó el vaso. Según él, las políticas de Vox ignoran a Canarias y se centran únicamente en la Península. Sin embargo, esta revelación parece más una excusa conveniente que una genuina disidencia ideológica. ¿Por qué ahora, Ginés? ¿Por qué no antes, cuando las mismas políticas ya eran evidentes? La respuesta es simple: porque ahora le conviene mantener su puesto.

 

El trasfuguismo no es nuevo en Lanzarote. Políticos como Juan Manuel Sosa, Tomás Fajardo y Emilia Perdomo han cambiado de bando bajo el pretexto de la "responsabilidad". Ginés no es diferente. Rechaza entregar su acta de concejal argumentando que su salida traería inestabilidad y abriría la puerta al PSOE. ¡Qué cómico resulta imaginarse a Vox y PSOE en una alianza! Casi podemos ver a los líderes de Vox y PSOE tomados de la mano, cantando "Kumbayá" mientras planean el futuro de Teguise. Esa perspectiva es tan absurda que casi podría competir con el mejor monólogo de un club de comedia. Ginés debería considerar seriamente una carrera en el humor, porque claramente la seriedad política no es lo suyo.

 

Es indignante que Ginés se presente como el guardián de la estabilidad cuando en realidad está burlándose de sus votantes. Los ciudadanos que confiaron en él y en Vox se sienten traicionados. No se puede permitir que los políticos utilicen sus cargos como herramientas de negociación personal, ignorando la voluntad de quienes los eligieron. La política debe ser un ejercicio de integridad y servicio público, no un circo de conveniencia personal.

 

El pacto antitransfuguismo existe para evitar precisamente estas situaciones, pero es evidente que necesita ser reforzado y aplicado con mayor rigor. Políticos como Ginés González deben ser un ejemplo de lo que no debe ocurrir en la política española. La deslealtad no puede ser tolerada ni justificada bajo ninguna circunstancia. Es fundamental que los partidos y las instituciones trabajen juntos para asegurar que los tránsfugas no encuentren refugio en nuestra democracia.

 

Ginés González ha demostrado ser un tránsfuga más, utilizando argumentos vacíos para justificar su permanencia en el poder. Su caso debe servir como un llamado a la acción para fortalecer y hacer cumplir el pacto antitransfuguismo. La política en Lanzarote y en toda España necesita una limpieza urgente de aquellos que traicionan la confianza de sus electores por intereses personales. La responsabilidad política debe estar al servicio de los ciudadanos, no de las ambiciones individuales.

Bingo sites http://gbetting.co.uk/bingo with sign up bonuses