Sanidad y Lanzarote, nos va la vida en ello

Por Oswaldo Betancort, alcalde de Teguise

Cuando uno asume la responsabilidad de presentarse como alcalde de una localidad asume, como no puede ser de otra manera, las demandas de las personas que te han colocado en ese puesto, pero el deber no queda ahí en eso. Creo firmemente que además de satisfacer las necesidades de un pueblo, haciéndolas propias, el gobierno municipal debe ser propositivo y tener claro que existen muchas necesidades ciudadanas que no se convierten en demandas porque los vecinos desconocen los derechos que por derecho, valga la redundancia, pueden demandar.

 

Tomando esta verdad como punto de partida, no puedo estar más de acuerdo con el fin de esta asociación que el pasado viernes se presentó para reclamar al Gobierno de Canarias una sanidad digna para el pueblo de Lanzarote.

 

Ahora, que tanto se usa la hemeroteca, incluso en programas de televisión, deberíamos consultarla para que quede patente la posición de este alcalde en referencia a la sanidad en nuestra isla y en lo que a mí compete, en Teguise y en La Graciosa.

La solución que se le dio al Centro de Salud de Costa Teguise, en su momento me la plantearon como transitoria, pues este ayuntamiento puso a disposición del Gobierno de Canarias un suelo y las licencias pertinentes para la definitiva ubicación de unas instalaciones que por derecho deben realizarse en esta localidad, fundamentalmente por la cantidad de población que allí reside. Y no solo es el caso de Costa Teguise, es también necesaria y urgente en La Graciosa, donde las instalaciones son indignas a todas luces.

Espero y deseo que esa asociación que nace como “apolítica y social” sea así, a título personal estaré allí donde vayan, me sumo tanto en lo personal como en lo político ya que considero que debemos estar todos los lanzaroteños nacidos aquí o de adopción apoyando esta iniciativa que según se presenta, solo clama por los derechos fundamentales de un pueblo, de una isla.

 

Cuestiones como recortes de personal de urgencias, carencia de medios técnicos para la resolución diagnóstica de enfermedades y su tratamiento, como es el caso de la Unidad de Radioterapia, las largas listas de espera que TODOS sufrimos en nuestra isla, la carencia de ambulancias medicalizadas y, ¿por qué no?, la falta de un helicóptero con base en nuestra isla para atender tanto a Lanzarote como a La Graciosa, pone de manifiesto la dejadez reiterada que algunos políticos en este caso, de todos los colores, han tenido con Lanzarote y La Graciosa.

 

Como digo, creo que todo el pueblo de Lanzarote ha de clamar con voz alta y unánime una solución YA para este tema, pues nos va la vida en ello. Desde aquí hacer un llamamiento a la población conejera para que junto a sus familias, acudan el próximo sábado a la manifestación que partirá de la calle Real a las 11 horas, donde dejaremos claro que en Lanzarote tenemos una sola voz.

 

Como dijo Randy Paush: "Si no consigues tus sueños, puedes todavía conseguir incluso mucho más tratando de alcanzarlos"