Turistas desesperados, taxistas frustrados: ¿Son los micros y Uber la solución esperada en Lanzarote?
Foto. Viernes 11 de agosto 2023. 12.00 h
S. Calleja
Lanzarote, siempre ha sido un imán para turistas y residentes por igual. Sin embargo, algo tan simple como coger un taxi en el aeropuerto se ha convertido en una prueba de paciencia y resistencia. Aunque las interminables colas han sido consideradas un problema puntual, la realidad es que esta situación se está volviendo alarmantemente recurrente. Una imagen vale más que mil palabras, y la foto que hoy llevamos a portada, captada el pasado viernes 11 de agosto a las 12.00 h, nos lo deja claro: largas filas, rostros frustrados y familias enteras esperando bajo el sol ardiente.
Este problema no afecta solo a turistas cansados provenientes de lugares tan lejanos como Dublín o Varsovia. Los taxistas locales, a pesar de ser protagonistas involuntarios de este escenario, son los primeros en sentirse incómodos. Sin embargo, a pesar de la evidente necesidad de una solución, las propuestas para mejorar la situación parecen estar en punto muerto.
Uno de los debates más sonados es la unificación de la flota de taxis insulares. Actualmente, el sistema se basa en municipios, lo que puede ser un impedimento para una respuesta eficiente a la demanda. Unificarlos podría ser el paso lógico para enfrentar este desafío, pero este cambio sigue siendo una quimera. Paralelamente, las grandes empresas de guaguas de Lanzarote se están adaptando, utilizando micros eficientes que están ganando terreno ante la problemática de los taxis.
Sin embargo, en este escenario, surgen preguntas inevitables. Si los taxistas de Lanzarote no quieren perder más terreno frente a competidores como Uber, Car2Go y Cabify, ¿qué están dispuestos a hacer? Los expertos coinciden: Lanzarote no debe temer a la llegada de estas plataformas. Estas empresas podrían coexistir con los taxis tradicionales, siempre que se establezcan las condiciones justas y equitativas.
Pero aquí radica el quid del asunto: el tiempo juega en contra de los taxistas. Si no se toman medidas pronto, se corre el riesgo de que la proverbial "gallina de los huevos de oro" quede sin sustento. Las adaptaciones son necesarias en cualquier industria, y el transporte en Lanzarote no es la excepción. Es fundamental que los taxistas y las autoridades insulares reconozcan esta realidad y actúen en consecuencia.
Esperamos que, en un futuro cercano, las imágenes de las largas colas en el aeropuerto o las de algunas paradas de Playa Blanca o las del propio Arrecife sean solo un recuerdo y que tanto los visitantes como los residentes puedan disfrutar de un servicio eficiente y cómodo al llegar a esta hermosa isla. Por el bien de todos, es esencial que se busquen soluciones antes de que sea demasiado tarde.