Vecinos del norte celebran la recuperación de las emblemáticas Salinas de Órzola
Pejeverde
Lanzarote, 8 de enero de 2025. Las Salinas de Órzola, un emblema del patrimonio paisajístico de Lanzarote, han dejado atrás años de abandono y acumulación de residuos gracias a una intervención liderada por el Cabildo de Lanzarote y el Ayuntamiento de Haría. En un esfuerzo conjunto financiado a través de los fondos FDCAN (Fondo de Desarrollo de Canarias), operarios del Programa de Recuperación de Fincas han transformado este espacio natural protegido en un entorno limpio y revitalizado.
El Área de Paisaje y Soberanía Alimentaria, dirigida por el consejero Samuel Martín, ha coordinado las labores de limpieza y adecentamiento en una extensión de 12.749 metros cuadrados. Estas acciones no solo han recuperado la estética de las salinas, sino que también refuerzan su valor cultural y natural. Según Martín, esta intervención responde a una "demanda histórica" de los vecinos del norte de la isla, quienes habían solicitado durante años la conservación de este espacio único.
“El esfuerzo colectivo y la colaboración entre administraciones nos han permitido devolverle a las Salinas de Órzola su belleza y funcionalidad, preservando así una parte fundamental de nuestra identidad”, declaró el consejero.
Empleo y Medio Ambiente: Un Doble Impacto
La intervención se enmarca en el programa de empleo ‘Cuidando Lanzarote y La Graciosa’, una ambiciosa iniciativa del Cabildo que cuenta con un presupuesto de 12,5 millones de euros para el período 2023-2025. Este plan, dividido en ocho lotes de trabajo, no solo busca mejorar los espacios naturales y urbanos de la isla, sino también generar empleo local. Hasta la fecha, ha permitido la contratación de 158 personas que han trabajado en áreas sensibles como el Parque Natural de Los Volcanes, La Geria, y el Volcán de la Corona.
El Cabildo insiste en que este tipo de programas son esenciales no solo para embellecer Lanzarote, sino también para garantizar el equilibrio medioambiental y el desarrollo sostenible de la isla.
La recuperación de las Salinas de Órzola es un ejemplo del impacto positivo que puede lograrse mediante la colaboración interadministrativa y una planificación estratégica. Este esfuerzo no solo beneficia a los residentes del norte de la isla, sino que también refuerza el atractivo turístico de Lanzarote al preservar su riqueza natural y cultural.
Las instituciones insulares han reafirmado su compromiso con la continuidad de este tipo de iniciativas, que combinan la protección del medio ambiente con la promoción del empleo y la sostenibilidad.