Vuela Alto, Teresita: La dulzura de La Vegueta permanecerá en nuestros corazones
Foto. Agustín Márquez. Teresita
S. Calleja
Hoy nuestras palabras buscan el recuerdo. Te has marchado, Teresita, y con tu partida, La Vegueta, el Camino de las Huertitas, parece haber perdido un poco de su brillo, el mismo que tú le otorgabas.
La discreción y el trabajo fueron tus fieles compañeros de vida, junto a ese pañuelo que adornaba tu rostro y ese bardino que seguía tus pasos con lealtad.
Desde la época de mi abuelo Julio Blancas, has sido una figura emblemática, coincidiendo como vecina también con mi padre, Joaquín Calleja, en las tierras que vieron crecer generaciones.
Antonio Márquez, con su pluma, ha dibujado en palabras la belleza de tu existencia, una vida marcada por la sonrisa perpetua y el buen humor que te caracterizaba. “Nunca una sombra en tu mirada, nunca una palabra más alta que la otra, siempre la misma Teresita amable y buena que conocimos”.
Hoy a las 5 en Tinajo, dieron tú último adiós, pero tu recuerdo vivirá eternamente en cada uno de nosotros. A tu hija Teresa María, a tus hijos Pedro y José Francisco, extendemos nuestro más sincero pésame.
Descansa en paz, Teresita, y que tu recuerdo siga siendo un faro de amor y bondad para todos los que tuvimos el honor de conocerte.