Las Revoltosas" advierten posibles acciones legales tras la actuación de "Los Intoxicados
Pejeverde
La controversia ha sacudido la celebración del Carnaval de Arrecife al conocerse de que la murga "Las Revoltosas" denunciara públicamente un hecho que consideran un atentado contra su identidad y trayectoria artística. Durante la actuación de la murga "Los Intoxicados" , se permitió que personas ajenas a "Las Revoltosas" subieran al escenario en su representación, además de proyectar un video suyo sin la debida autorización.
Este incidente ha generado un profundo malestar en la agrupación afectada, que en un comunicado oficial expresó su indignación y calificó la situación como una "vulneración de derechos y una falta de respeto" hacia su historia y esfuerzo en el Carnaval.
Un atropello a la identidad murguera
Según lo manifestado por "Las Revoltosas" en Facebook, su nombre e imagen fueron utilizados sin su consentimiento en un acto público, lo que consideran una grave falta a la ética carnavalera. La agrupación dejó claro que su identidad está registrada legalmente y que cualquier uso indebido podría traer repercusiones legales.
"El respeto entre murgas es fundamental para la preservación de nuestra tradición carnavalera. No podemos permitir que se normalicen estas prácticas", señala el comunicado.
Exigen una disculpa pública
Como respuesta a lo ocurrido, "Las Revoltosas" han exigido a "Los Intoxicados" una explicación pública y una disculpa oficial por lo que consideran un uso inaceptable de su imagen. Hasta el momento, no ha habido declaraciones por parte de la murga señalada.
El hecho no ha pasado desapercibido entre los seguidores del Carnaval de Lanzarote. En redes sociales, el comunicado de "Las Revoltosas" ha generado un amplio debate, con opiniones divididas entre quienes condenan la acción de "Los Intoxicados" y quienes consideran que podría tratarse de un malentendido.
Posibles consecuencias legales
Más allá de la controversia mediática, la murga afectada anunció que tomará "las medidas oportunas" para defender su integridad y derechos. Dependiendo de cómo evolucione la situación, no se descarta que el conflicto trascienda el ámbito murguero y llegue a instancias legales.