Dolores Corujo( PSOE): ¿Cataluña por Encima de Canarias y Lanzarote?
Corujo votando hace una semana. Fuente PSOE
S. Calleja
En el actual panorama político español, se ha vuelto evidente que la relación entre la izquierda y la igualdad está en crisis. La reciente propuesta del gobierno de Pedro Sánchez para reconocer la singularidad de Cataluña mediante un sistema de financiación especial ha despertado una ola de dudas y preocupación en diversas Comunidades Autónomas (CCAA). La izquierda esté adoptando políticas que históricamente han sido ajenas a sus principios. Vamos por partes.
Empezamos por mirar a nuestra diputada nacional, oriunda de San Bartolomé , la secretaria general del PSOE en Lanzarote y consejera del Cabildo Insular de Lanzarote, Dolores Corujo Berriel. Sin ruborizarse, Corujo está apoyando las diferencias y desigualdades que propone su jefe, Pedro Sánchez. Me apuesto una cerveza negra a que Dolores Corujo no dice ni pío al estarse cometiendo esta injusticia con Canarias y, por ende, con Lanzarote. ¿Es mejor Cataluña, señora Corujo?
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha dejado claro que el gobierno está dispuesto a reconocer la singularidad de Cataluña en un sistema de financiación especial. Esto ha provocado una inmediata reacción de los socialistas en Castilla-La Mancha y Extremadura, quienes han manifestado su oposición a esta propuesta. La preocupación es comprensible: una reforma del sistema de financiación autonómica que favorezca a Cataluña podría detraer recursos de otras regiones, afectando negativamente la prestación de servicios públicos y la capacidad redistributiva del Estado.
El diputado de Más Madrid, Pablo Gómez Perpinyà, ha resumido acertadamente el sentir general en su comentario en la red social X: "Si el PSOE quiere algún día volver a gobernar en la Comunidad Valenciana, Extremadura, Andalucía o las Castillas, quizás debería introducir algún elemento democratizante y redistributivo en la apreciación de esas singularidades. No hay mayor singularidad que la desigualdad". Esta declaración subraya la necesidad de abordar las singularidades regionales con una perspectiva de igualdad y justicia social.
La situación se torna aún más crítica cuando se examina la postura del PSOE en Canarias. En Lanzarote, nuestra diputada nacional ( y digo nuestra porque es de nuestra tierra) Dolores Corujo se encuentra en una posición clave. ¿Votará a favor de otorgar más recursos a Cataluña que a Canarias? Según fuentes cercanas, a Corujo no le temblará la mano al priorizar los intereses de su partido y de ella misma , sobre los de su propia comunidad. Esta actitud refleja una preocupante desconexión entre los representantes y las necesidades reales de sus electores.
¿Traición a los Principios de la Izquierda?
La adopción de políticas que favorezcan a un único territorio en detrimento de otros plantea una pregunta fundamental: ¿ha aceptado la izquierda en el Gobierno algunas políticas totalmente reñidas con las que históricamente la han caracterizado? La izquierda tradicionalmente ha defendido la igualdad y la justicia social. Sin embargo, la propuesta de reconocer la singularidad de Cataluña parece contradecir estos principios al fomentar una desigualdad entre las regiones.
El reconocimiento de una singularidad catalana no es una idea nueva. En 2012, el Partido Popular también propuso un modelo propio de financiación para Cataluña. Sin embargo, este modelo no se llegó a implementar debido a la falta de consenso y la fragmentación política.
La Necesidad de un Consenso Amplio
La reforma del sistema de financiación autonómica requiere un consenso amplio entre las CCAA, algo que parece difícil de lograr en el contexto actual. Cualquier reforma debe ser llevada a cabo con el objetivo de mejorar el sistema, no de empeorarlo.
La izquierda en el gobierno debe recordar sus principios fundamentales de igualdad y justicia social, y asegurarse de que cualquier reforma del sistema de financiación autonómica refleje estos valores. La singularidad de la desigualdad no debe ser la nueva norma. Aunque, viendo cómo se las gasta el jefe de Dolores, podemos esperar una justificación basada en los calificativos habituales hacia los críticos, como del fango, fascistas, ultraderechistas, extremistas, machistas, sacos de mierda, cocainómanos, etc.