“Transformaremos el servicio municipal de guaguas, implantando más líneas y mejorando las frecuencias, para acercar los barrios al centro”
Arrecife, 18 de mayo de 2019.- ¿Qué proporción de la desigualdad urbana y del acceso a las oportunidades se debe a la desigualdad espacial? Parece claro, y ya lo indicó la ONU en 2015, que el entorno en el que uno vive es un determinante del acceso, y es el acceso, a su vez, lo que determina donde trabajamos, realizamos nuestras compras, recibimos atención sanitaria y muchas otras cosas más. Las ciudades sostenibles del futuro, sin embargo, no tienen barreras ni límites espaciales. Se construyen a partir de descentralizar las políticas y los servicios municipales acercando los barrios al centro y el centro a los barrios para crear un único tejido urbano. Vamos a trabajar para incrementar la igualdad y las oportunidades formativas y educativas y a fortalecer las redes de apoyo social y comunitario para reducir las desigualdades territoriales.
Para ello, vamos a subsanar las carencias de un sistema de transporte público insuficiente para atender las necesidades de una nueva ciudad. Implantaremos más líneas de guaguas entre los barrios y el centro, ampliando las frecuencias y con recorridos inteligentes que lleven a los vecinos de forma rápida y segura a sus destinos, con paradas estratégicas en lugares de especial interés como son hospitales, centros escolares y áreas comerciales. Recorridos pensados por y para los usuarios de un transporte colectivo verde, ecológico, más eficiente, eficaz y seguro.
En nuestro modelo de ciudad, ocupan un lugar destacado los concejales de distrito, representantes del ayuntamiento que construirán trato directo con los vecinos y servirán de interlocutores válidos en la resolución de sus problemas cotidianos. Ellos formarán parte del tejido social de cada barrio para planificar y ejecutar los proyectos de dinamización sectorial que necesitan.
‘Arrecife, capital de Lanzarote’ es una ciudad que no entiende de barreras. Es abierta, transitable y conectada, una ciudad en la que los barrios se entroncan con el centro para articular un nuevo espacio urbano sin barreras arquitectónicas, presentes aún en demasiados rincones de la ciudad, y ordenada a partir de una convivencia nutrida y enriquecida de los conocimientos, usos y costumbres de las distintas culturas que hacemos esta ciudad.